1er Modo de orar con los cinco sentidos corporales-[EE 247-248]-(28 septiembre 2013)

Pasos de la oración
1 - Relajarse: Sentarse, pasear… ¿A dónde voy y a qué? [EE 239]. Voy a estar con un amigo.
2 – Preparar el material necesario: Elegir un texto del Evangelio, que ya se haya contemplado.
            Los sentidos corporales son: vista, oído, tacto, gusto y olfato.
3 - Oración preparatoria: Que todas mis intenciones, acciones y operaciones sean puramente ordenadas en servicio y alabanza de su divina Majestad (Ej. 240). Pido a Dios que toda mi vida se oriente hacia Jesús que es camino, verdad y vida.
4 – Petición: A Jesús: Señor, dime en qué he pecado con cada sentido. Ayúdame a corregirme (EE 240, 247). Te pido que te pueda imitar en el uso de los sentidos. (Ej 248). Te pido que mi manera de ver las cosas, mis gustos, mis repugnancias… sea semejante a la tuya.
            A la Virgen: Oh, María, dígale a Jesús que quiero imitarle en el uso de los sentidos.
Quiero imitar a la Virgen.
            Debilidades de nuestros sentidos
<Todos veían y oían lo que hacía y decía Jesús. Pero para unos era ‘el profeta’ y para otros actuaba en nombre de Belcebú. Si todos presenciaban lo mismo, ¿cómo suscitaba interpretaciones tan disparatadamente distintas?> (Chércoles)
Jesús responde: “Porque se ha embotado su corazón” (Mt 13, 10-16). Ven y oyen sólo lo que se acomoda a sus ideas y prejuicios. Por eso Jesús confiesa que tiene que hablarles en parábolas.
Por ejemplo, los fariseos y escribas le acusan: “Este acoge a los pecadores y come con ellos”.
Tienen el ‘prejuicio’ de que no se puede ser ‘puro’, si uno trata con impuros.
Para ayudar a vencer este prejuicio, Jesús les propone las parábolas de la misericordia: la oveja y dracma perdidas, el Hijo Pródigo. Pero, aun así, los fariseos no entienden. Por eso Jesús termina diciendo: Dichosos los ojos de Ustedes, porque ven, y sus oídos porque oyen, porque hay otros ojos que no ven, y otros oídos que no oyen por sus prejuicios.
Debemos pedir que lo que veamos y oigamos, lo interpretemos correctamente.

5 - Puntos.
Punto 1 – Orar con los sentidos
1.-Orar con la vista. El mejor regalo que le puedes hacer a una persona es una sonrisa, una broma. Hay miradas de cariño y compasión. Pero también hay miradas de desprecio, de dominio o de indiferencia. ¿Cuáles son las de Jesús? ¿Cuáles son las mías?
Lecturas: Salmos 121 (120) y 123 (122): ver cómo oran los afligidos, levantando sus ojos a Dios. Cómo mira Jesús: a los que no son bien vistos por otros (Lc 7, 44), a sus discípulos (Mt 9,9; Lc 22, 61-62), a personas sencillas (Lc 21, 1-2), a enfermos (Lc 13, 12), etc. ¡Enséñanos a mirar como Tú!.
En la noche me examino: ¿Cómo he mirado? ¿Sonrío a los demás? ¿O me quedo frío, como si los demás no existieran o no me importaran? ¿Debo mirar "de otra manera"?
2.- Orar con el oído. Es mejor escuchar que oír. Escuchar requiere más atención e interés para el que habla. Estamos rodeados de mucho ruido. Necesitamos el silencio para escuchar a Dios.
Habla, Señor, que tu siervo escucha”. "Fides ex auditu" (“La fe entra por el oído”; con fe escuchamos la Palabra de Dios).
Jesús nos dice que estuvo siempre a la escucha de la voluntad de su Padre Dios (Jn 4, 34) y muy atento a las necesidades de la gente que le rodeaba (Jn 5, 6).
3.- Orar con el gusto. Gustar es paladear, saborear. El gusto se nota en la comida, en la bebida, en el modo de vestir, en la forma de arreglar tu habitación o tu oficina. Hay personas que tienen "buen gusto", y otras tienen "mal gusto". ¿En qué se diferencian? ¿En qué debo cambiar?
"Gustad y ved qué bueno es el Señor, dichoso el que se acoge a Él" (Salmo 34-33). De Dios siempre se dice que tiene buen gusto, que cuando creó las cosas, todo le pareció "bueno", "bonito" y "bello" (Gen 1, 1-31). (Itinerario 1).
Punto 2 - Elegir un texto del evangelio. Para la contemplación de hoy cada uno elige un pasaje evangélico: El Hijo Pródigo, el Buen Samaritano, la pesca milagrosa (“Les haré pescadores de hombres”), la Ascensión (“Vayan por todo el mundo”). La Contemplación del Nacimiento de los Ejercicios es un ejemplo de este 1er modo de orar con los cinco sentidos corporales (EE 110-117).
Leer todo el texto sin prisa y con tranquilidad. Imaginarse la escena “como si presente me hallase” (EE. 114) E ir aplicando los sentidos a lo que estoy contemplando.
-          Ver a las personas y paisajes con la vista de la imaginación. Meditar y contemplar lo que estoy viendo. Sacar algún provecho de todo esto. ¡Qué bonito ver hablar a Jesús, a María, al Niño Jesús, a José, a los pastores de Belén, etc (cualquier pasaje evangélico)!
-          Escuchar lo que dicen o pueden decir. Dejar que las palabras penetren en mi interior.
-          Oler y gustar la profundidad de aquella escena. A veces decimos: “Me huelo que telefoneará”, o “Esto me ha dejado un buen sabor de boca”.
-          Tocar con las manos, abrazar, besar los sitios que Jesús pisa y toca. Y ¿por qué no? Dar la mano, abrazar o besar a Jesús o a alguno de los personajes que estoy contemplando! (Borrás 18-19).
-          Poner la mano sobre el hombro, dar un golpe suave en el brazo.
-          ¿Cómo usó Jesús los cinco sentidos? Decir un Padre Nuestro (Ej 248).
-          ¿Cómo usó María los cinco sentidos? Decir un Ave María (Ej 248)
Punto 3 - ¿Cómo usar los sentidos? Pongamos un ejemplo: Te insultan. ¿Cómo reaccionar? He aquí varias cosas que puedes hacer, según el caso: No respondas con otro insulto. Cállate y le hablas otro día más en calma. Sonríe, aceptando las humillaciones (Dos Banderas). Recordar cómo reaccionó Jesús las humillaciones de la Pasión: con silencio, respondiendo suavemente.
-          ¿En qué he pecado en cada sentido? ¿Cómo uso cada sentido?
6 - Coloquio
7 – Examen. ¿Qué sentimientos o actitud me ha impactado más? ¿Qué actitud de mi vida ha quedado conmovida? ¿Qué sentido he podido aplicar con más facilidad y cuál me ha costado más? ¿Cómo ha ido la preparación? Y por todo ello dar gracias.
Bibliografía
-          Iniciación a la experiencia de Dios. Itinerario 1, Sal Terrae, Santander 2009, España.
-          Chércoles, Adolfo, S.J. La oración en los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, Revista Manresa Nº   , Año       . Ver texto en:
-          Borrás, Pere (1990) Orar con S. Ignacio de Loyola. Seminario Ejercicios. Colección ‘Ayuda’. Compañía de Jesús – Cataluña. Cristianisme i Justicia. Págs. 18-19.

José Martínez de Toda, S.J.
Preparándonos para los Ejercicios - Iglesia S. Francisco - El Silencio, Caracas

10 Septiembre 2013- martodaj@gmail.com

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